132019Sep
Cómo recuperar tu piel después del verano

El verano tiene un efecto inevitable sobre nuestra piel, sobre todo por la exposición prolongada al sol, pero esta no es la única razón. En el siguiente artículo aprenderás cómo eliminar los efectos negativos del verano en tu piel.

Cuando en mi consulta de Medicina Estética en Zaragoza comento con mis pacientes el impacto que tienen los rigores veraniegos sobre la piel es inevitable que alguien haga un comentario muy típico: “Pero, si a mí no me da el sol” o “Siempre voy con sombrero y huyo de la exposición solar directa”

Pero cuando hablo de los excesos del verano no hago referencia exclusivamente al sol. Hay otra serie de factores que hacen que nuestra piel tenga que rendir al máximo en las fechas de calor: la sequedad ambiental (aunque no haya impacto directo de los rayos solares sobre la epidermis), el cloro de las piscinas, el salitre del mar…

Es por todo esto que tras un período de máxima exigencia es necesario darle algo de tregua y deshacernos en cuidados hacia la parte de nosotros que está más expuesta y que es la que primero vemos nosotros mismos y los demás: la piel.

¿Qué efecto tiene el sol sobre nuestra piel?

El sol provoca un envejecimiento prematuro en nuestro rostro y nuestro cuerpo, y esto se hace evidente después de cada verano cuando son aparecen las manchas, las arrugas y la sequedad.

Si tomas mucho el sol, notarás pérdida de luminosidad, falta de hidratación, un tono desigual en la piel y la aparición de manchas, brotes de acné y piel cetrina. En septiembre llega la hora de cuidar la piel y combatir todos estos problemas.

Los tratamientos más adecuados para nuestra piel tras el verano

La medida inicial y obligada es, como en tantos aspectos de la vida, comenzar con una adecuada limpieza.

Una limpieza profunda de la capa más superficial de la piel (la epidermis) nos garantiza la eliminación de las células dañadas por el verano y la estimulación del nacimiento de células nuevas, no agredidas.

La principal ventaja de los peelings es que se restaurara el daño causado por la exposición al sol, se previene y combate el envejecimiento prematuro, así como las marcas del acné o las manchas.

Esto se ha podido (y debido) ir haciendo a lo largo del verano, periódicamente, con peelings de arena en la playa (quien haya tenido la suerte de disfrutar de la misma).

Ahora toca pasar por un buen centro de Medicina Estética y someterse a los tan gratificantes y relajantes tratamientos corporales: masajes corporales con sustancias especiales que eliminan las células muertas y dañadas.

Uno de los aspectos más importantes después del verano es el de la hidratación cutánea. Esto pasa por una medida tan básica como poco frecuentada en la población: beber abundante agua diariamente.

Lo ideal sería beber una media de un litro y medio a dos litros de agua al día. Y por supuesto, hacer esto durante todo el año. No sólo en verano.

hidratacion piel tras el verano

Desde un punto de vista de hidratación específicamente de la piel, hay varias medidas que ayudan notablemente. Una de esas medidas es la de “repoblar” la piel con ácido hialurónico. El famoso ácido hialurónico es una sustancia que tenemos en nuestro organismo, especialmente en piel, y cuya función es actuar de “esponja”, es decir, fijando agua.

Es fácil concluir que cuanto más ácido hialurónico tengamos en nuestros tejidos, mayor será el agua retenida, y mayor será el grado de hidratación.

La manera de aportar ácido hialurónico a nuestros tejidos debe ser doble:

  • Mediante la ingesta de suplementos que lo contengan (medida un tanto discutida en cuanto a su absorción oral)
  • Mediante la aplicación directa a través de la piel (única medida demostrada como inequívoca y eficaz).

Lógicamente esta última vía debe hacerse por profesionales médicos cualificados y en un ámbito clínico. Los rellenos con ácido hialurónico nos ayudarán a eliminar arrugas y recuperar la expresividad.

A la vez que nos aseguramos que nuestra piel está bien hidratada, tenemos que garantizar que está bien “nutrida”. Nuestro manto más externo necesita de un aporte diario e importante de vitaminas y antioxidantes debido a que las células se recambian constantemente y a que, al ser la capa más externa de nuestro organismo, está muy expuesta a la agresión tóxica exterior.

  • El modo de lograr esta nutrición celular es, al igual que en el caso de la hidratación, doble: Mediante la ingesta de suplementos vitamínicos y antioxidantes
  • Mediante la aplicación directa de cócteles concentrados de estas sustancias en el ámbito de clínicas de medicina estética.

La aplicación de todas estas sustancias hidratantes, vitamínicas y antioxidantes se hace de manera mínimamente invasiva y con apenas molestia para la paciente. Gracias a este tratamiento lograremos una piel firme y corregiremos la arrugas y líneas de expresión.

En septiembre, no hay excusas para no cuidar la piel.


Pedir cita con Dra. Cristina Sainz Arellano

Calle Glorieta Diego Velázquez 2, 50006 Zaragoza

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