152016Jun
Llega el verano, ¿cómo debo preparar mi piel?

Una de las principales funciones de nuestra piel es la de protegernos. Y hay épocas del año, especialmente el verano, en las que nuestra membrana cutánea debe dar lo mejor de sí misma.

El verano es el auténtico “banco de pruebas” para medir la funcionalidad de nuestra piel y la época de máxima exigencia.

La altísima exposición solar, las elevadas temperaturas, el contacto con medios físicos poco habituales (agua salada del mar, cloro en las piscinas) hacen necesaria la mejor respuesta en términos cutáneos. Por eso, es importante que nuestra piel se encuentre en las mejores condiciones posibles para hacer frente a la época estival.

La doctora Cristina Sainz lo explica así: «Para llegar al verano con una piel en condiciones, hay que comenzar a prepararla un tiempo antes. De hecho, lo ideal sería no descuidarla en ningún momento del año y atenderla adecuadamente de manera diaria, sea cual sea la estación en la que nos encontremos”.

“Pero cuando se acerca la época veraniega hemos de tener muy en cuenta una serie de aspectos para optimizar su rendimiento durante la misma».

Pregunta.- ¿Cuándo habría que empezar a preparar la piel de cara al verano?

Dra. Cristina Sainz.- Sería ideal comenzar con alguna estrategia de preparación de la piel, al menos, un par de meses antes del momento de máxima demanda.

Deberíamos tomar, por vía oral, algún producto que contuviera vitamina A (tocoferol), licopenos, vitamina E, selenio… con la finalidad de proteger la piel frente al enorme daño oxidativo que originan los rayos solares.

Hay multitud de preparados de vitaminas en el mercado.

P.- ¿Estas sustancias se encuentran de forma natural en los alimentos?

Dra. S.- Lo realmente perfecto sería que aportáramos todos esos nutrientes a través de una alimentación rica en frutas y verduras de buena calidad. Pero nunca está de más reforzarse con suplementos en épocas especialmente exigentes. Aún estamos a tiempo. Nuestra piel lo agradecerá.

P.- ¿Hay que tomar el sol poco a poco?

Dra. S.- Sí, es otra de las grandes pautas generales a tener en cuenta. La exposición solar ha de ser progresiva y gradual.

¿Nadie se ha planteado por qué tenemos una primavera antes del duro verano? Pues muy sencillo: la naturaleza nos va preparando poco a poco, con una elevación progresiva de las temperaturas y de las horas de exposición solar, para que nuestro cuerpo se vaya acostumbrando para estar preparado y soportar los rigores veraniegos.

P.- ¿Qué actividades son recomendables durante la primavera?

Dra. S.- Debemos aprovechar esta oportunidad climatológica para dar paseos, salir a los parques, usar ropa que vaya dejando expuestas más partes de nuestra superficie corporal (camisetas, pantalones y faldas cortas…).

De este modo, nuestras células irán sintetizando melanina (pigmento cutáneo protector) de manera paulatina para prepararnos para el duro sol estival.

Se recomienda beber al menos un litro y medio de agua al día. Más si se realizan actividades al aire libre

P.- ¿La hidratación es otra de las claves en la preparación y cuidado de nuestra piel?

hidratacion-piel-verano

Dra. S.- Podríamos escribir un libro acerca de la importancia de la hidratación. Los especialistas insistimos en que se debe beber una media de litro y medio de agua al día. Una cantidad mayor, si realizamos ejercicio y aún más, si esa actividad física se efectúa al aire libre.

El agua es vital para nuestro organismo en general y para nuestra piel en particular. Tanto es así que el famoso ácido hialurónico que enriquece muchos de los productos dermocosméticos y que muchos pacientes se aplican en el rostro, tiene como casi exclusiva misión el retener agua en la piel y los tejidos.

P.- ¿Quiénes deben cuidar de forma especial su piel?

Dra. S.- Además de estas pautas generales, hay pautas específicas que se pueden proponer para determinados grupos. Los niños son el colectivo más sensible y al que más deberíamos proteger.

La protección solar se hace indispensable para los pequeños.

Asimismo, la hidratación es algo que tiene que estar presente mediante una botellita de agua que esté constantemente al alcance del menor.

Otro colectivo sensible es la tercera edad. Los cuidados básicos son los mismos que en el caso de los menores. Y aquí, he de hacer una única advertencia: ante cualquier mancha, peca, granito… nuevo o con comportamiento extraño en piel, hay que acudir directamente a consultar con el dermatólogo.

P.- ¿Cuáles son los cuidados específicos de la piel cuando se acerca el verano?

Dra. S.- En la edad adulta, el cuidado ha de ser el básico reforzado por aspectos extra si la exposición solar es intensa (trabajos al aire libre, ejercicio al aire libre…).

Esos cuidados extra pasan por el uso de una dermocosmética enriquecida con principios nutritivos e hidratantes: ácido hialurónico, proteoglicanos, péptidos, factores de crecimiento… Uno de los recursos que últimamente se están utilizando más, es el acudir a clínicas médico estéticas para la aplicación directa en el rostro de todos estos principios.

Ese gesto lleva implícito un grado máximo de cuidado y atención hacia una piel saludable y protegida.

P.- ¿Hombres y mujeres han de cuidar su piel por igual?

Dra. S.- En lo que se refiere a cuidados básicos ¡por supuesto que sí! Una vez dicho esto, es cierto que la piel de los hombres y de las mujeres no es igual.

Por eso, las casas de dermocosmética crean líneas diferenciadas para la piel del hombre. Lo ideal sería utilizar líneas específicas para rehidratar la piel y minimizar el daño provocado por las altas temperaturas estivales.

P.- ¿Quién debe orientarnos sobre el cuidado específico de nuestra piel?

Dra. S.- He explicado aspectos genéricos del cuidado de la piel. Para indicaciones más concretas y específicas, lo recomendable es acudir a la consulta de los especialistas (dermatólogo o médico estético).

Allí, nos harán un adecuado diagnóstico y nos propondrán el tratamiento perfecto para nuestro tipo de piel.

Pedir cita con Dra. Cristina Sainz Arellano

Calle Glorieta Diego Velázquez 2, 50006 Zaragoza

Comparte este artículo en...