Todo lo que debes saber sobre la hipertensión arterial

¿Te han diagnosticado hipertensión y estás hecho un mar de dudas al respecto? Esta enfermedad asintomática no tiene cura a día de hoy, pero es posible controlarla si tomas la medicación pautada por el médico e incorporas hábitos saludables. Así lograrás disminuir los riesgos para la salud vascular y general del paciente.

¿Qué es la hipertensión?

La hipertensión es un trastorno de los vasos sanguíneos, los encargados de llevar la sangre que bombea el corazón a todo nuestro cuerpo. La tensión arterial, por otro lado, es la fuerza con la que circula toda esa sangre a través de los vasos o arterias. Si la tensión arterial es alta, el corazón tiene que hacer un mayor esfuerzo para bombear la sangre, provocando diversas afecciones en el organismo del paciente.

La tensión arterial es la fuerza con la que circula la sangre a través de los vasos sanguíneos. Si la tensión arterial es alta, el corazón tiene que hacer un mayor esfuerzo para bombear la sangre.

Estas afecciones causadas por la hipertensión pueden incluir diversas enfermedades del corazón, accidentes cerebro-vasculares o insuficiencia renal entre otros.

¿Cuándo se considera que la presión arterial es alta (HBP)?

Gracias al tensiómetro, o también conocido como esfigmomanómetro, podemos analizar la fuerza (presión) con la que circula la sangre por los vasos sanguíneos. La tensión arterial se mide en milímetros de mercurio (mm Hg) y podemos distinguir dos tipos distintos, que deben analizarse por separado.

• Presión arterial sistólica: Es la presión que crea el corazón cuando bombea sangre a todo el cuerpo. Esta es la cifra más alta y lo normal en adultos es tener menos de 120 mm Hg. Sin embargo, se considera alta cuando es superior a 130 mm Hg.
• Presión arterial diastólica: Es la presión residual que se genera en los vasos y arterias en los periodos de relajación del corazón, es decir, en los espacios de tiempo entre latido y latido. Esta cifra es la más baja y lo normal es que esté por debajo de los 80 mm Hg. En una persona con hipertensión es igual o superior a los 90 mm Hg.

Niveles de tensión arterial según la American Heart Association

Causas de la hipertensión arterial

También podemos clasificar la hipertensión arterial dependiendo de las causas que la produzcan:

Hipertensión primaria o esencial

La mayoría de pacientes (95%) que padecen hipertensión sufren este tipo. Normalmente,  en este tipo de casos se desconocen las verdaderas causas pero sí hay factores de riesgo que pueden facilitar su aparición:

• Antecedentes familiares con hipertensión.
• La edad (a partir de los 60 años los vasos sanguíneos pierden elasticidad y se debilitan).
• Niveles altos de estrés.
• El sobrepeso.
• El tabaco o el consumo excesivo de alcohol.
• La utilización de anticonceptivos orales.
• La mala alimentación y tomar sal en exceso en las comidas.
• El sedentarismo.
• La diabetes.
• Los orígenes (se ha demostrado que la hipertensión es bastante frecuente en personas con ascendencia africana).

Hipertensión secundaria

Se considera hipertensión secundaria cuando esta es provocada por otra enfermedad o cambio en el organismo del paciente, como, por ejemplo:

• Tumores
• Reacciones a medicación
• Embarazo
• Enfermedades de la paratiroides (las glándulas que ayudan a mantener el nivel de calcio y fósforo en la sangre en equilibrio).
• Acromegalia (exceso de hormona del crecimiento en el cuerpo).

Persona con niveles normales de tensión arterial, según la escala de la Asociación Americana del Corazón

Tratamiento médico para la hipertensión

Existe una gran variedad de medicamentos para regular la hipertensión. Todos ellos deben ser pautados y controlados por un médico especialista en salud vascular, como el Dr. J. Ignacio Urtiaga, miembro de Doctología y especialista en salud vascular en Zaragoza. Algunos son:

• Diuréticos de tiazida para ayudar al cuerpo a eliminar el sodio y el agua.
• Inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina para relajar los vasos sanguíneos.
• Bloqueadores de los canales de calcio para relajar los músculos de los vasos sanguíneos.
• Alfabloqueadores para reducir los impulsos nerviosos hacia los vasos sanguíneos y evitar que se estrechen.
• Alfabetabloqueadores para reducir los impulsos nerviosos hacia los vasos sanguíneos y los latidos, reduciendo así la cantidad de sangre que bombea el corazón.
• Vasodilatadores para evitar que se estrechen las arterias.

Otras recomendaciones para controlar la hipertensión

Otras pautas para tratar la hipertensión y mejorar nuestros hábitos de vida incluyen:

• Hacer deporte frecuentemente y adaptado a nuestra capacidad.
• Llevar una dieta con menos sal y menos consumo de grasas.
• Controlar nuestro peso y mantenerlo en unos niveles saludables.
• Eliminar el consumo de tabaco y alcohol.
• Intentar reducir nuestros niveles de estrés con prácticas de relajación y meditación.

Si tienes alguna duda o necesitas ayuda para controlar la hipertensión no dudes en contactar con nosotros. El Dr. J. Ignacio Urtiaga Barrientos, es médico especialista en cirugía vascular con más de 40 años de experiencia, 15 de ellos dedicándose al tratamiento de enfermedades endovasculares. ¡Visita su consulta en Zaragoza!